Hablemos sobre Biopolímeros
Los mal llamados biopolímeros realmente son sustancias que se aplican bajo la premisa que producen aumento de los glúteos. Dentro de esas sustancias hemos encontrado silicona líquida, parafina, e incluso aceite de cocina y aceite de carro quemado. El problema de estas sustancias es que no están diseñadas para estar dentro del organismo por lo cual se empieza a desarrollar una reacción a cuerpo extraño, o lo que se describe como Alogenosis iatrogénica. Esta condición cada vez se estudia más y se ha identificado que si el paciente tiene una predisposición a una enfermedad reumatológica, como por ejemplo, artritis reumatoidea, lupus, etc., los biopolímeros pueden desencadenarla más rápido y de forma más grave de lo que usualmente se presenta.
Uno de los principales motivos de consulta de los pacientes es la presentación de síntomas locales como enrojecimiento, la piel empieza a cambiar de color y se torna de un color violáceo o morado, lo que se conoce como cutis marmorata. Generalmente, esto nos habla de actividad de la enfermedad, el organismo desencadena una reacción inflamatoria para tratar de expulsar o de eliminar esas sustancias que son reconocidas por el cuerpo como extrañas y se genera un proceso de inflamación.
Cuando los pacientes asisten a mi consulta, lo primero es realizar un examen físico adecuado para determinar la actividad de la enfermedad de acuerdo a los cambios de la piel ya mencionados. El siguiente paso es solicitar una resonancia nuclear magnética o un Tac con protocolo para biopolímero o para sustancias extrañas en el cuerpo; esto nos da una idea de la magnitud del volumen infiltrado y de la profundidad a la que se encuentra, información con la que podemos realizar un plan de tratamiento que se ajuste a cada paciente.
En lo personal, en la consulta trato de ser muy claro con los pasos y el tratamiento a realizar, ya que otro de los motivos de consulta frecuentes son los pacientes que ya se han realizado procedimientos quirúrgicos para extracción de biopolímeros y que asisten muy desmotivados porque tenían expectativas de que se retiraran los biopolímeros en su totalidad. La experiencia ha demostrado que ninguna cirugía en un solo tiempo quirúrgico logra extraer el 100% de los biopolímeros, por lo que se requieren de 2-5 procedimientos quirúrgicos; en cada procedimiento quirúrgico se logra retirar entre 20 y el 50% de los biopolímeros.
Ahora hablemos de las técnicas quirúrgicas. A grosso modo hay dos tipos de opciones para retirar biopolímeros: la técnica abierta con resección en alas de mariposa y la técnica por medio de liposucción asistida por ultrasonido vaser.
Esta última es mi técnica de elección, lo que se hace es calentar un poco esta sustancia y por medio de liposucción podemos hacer el retiro, logrando menor deformidad, una marcada mejoría, y una forma armónica a la región glútea.
Adicionalmente, yo le recomiendo a mis pacientes, en lo posible, no realizar lipoinyección glútea en estos casos para tratar de mejorar la deformidad, ya que si el paciente tiene biopolímeros, aumenta el riesgo de infección y de reacción inmunológica. Únicamente se contempla esta opción en casos muy puntuales y específicos donde la deformidad sea muy marcada y el beneficio sea mayor.
Espero que con este artículo se resuelvan algunas de las inquietudes que tengan sobre la extracción de los biopolímeros. No duden en contactarnos si tienen preguntas y agendar su cita para este procedimiento.